Charlamos con Lorenzo Santolino tras su vuelta del Rally Dakar 2023. El piloto de Sherco regresa de Arabia Saudí con los deberes hechos. Noveno, satisfecho con estar entre los diez primeros como mejor español en la clasificación, y con la mirada puesta en el ‘top 5’ en el futuro para mejorar la sexta posición de hace dos años.

Tras hablar con el salmantino en la etapa de descanso, en la que destacó que “Sherco se ha hecho un hueco en el mundo de los rallies”, en Enduro 21 hemos querido cerrar el círculo y que Loren hiciera su particular lectura de cómo le ha ido esta edición, la más dura que se recuerda desde que el Rally Dakar se mudó a Arabia Saudí. 

Loren, ¿cómo ha ido todo? 

“Ha sido un Dakar muy positivo para nosotros, donde todo el equipo ha trabajado muy bien. Llegábamos con una moto mejorada respecto al año pasado y, aunque la moto era la misma, había pequeños cambios que han hecho que la moto rindiera mejor, sobre todo en las dunas. 

Hemos trabajado con la caja de cambios para las zonas arenosas y eso hace que la moto vaya mucho mejor en cuanto a escalonamiento, y que siempre mantenga el empuje óptimo en la arena, algo que nos costaba mucho antes y que me ha hecho la vida más fácil este año. En los demás sitios, la moto se comporta muy bien. Por lo que, en ese sentido, todo ha ido bien”. 

Un nuevo ‘top 10’, ¿objetivo cumplido?

“Estar en el ‘top 10’ del Dakar no es nada fácil. Como ya dije antes de partir hacía allá, estar en esos puestos es bueno para el equipo y para mí. Obviamente, el objetivo era intentar estar en el ‘top 5’ para mejorar mi sexto puesto de 2021, pero sabíamos que no resulta nada fácil. Sin embargo, los objetivos están para eso, hay que marcarse objetivos realizables pero que cuesten conseguir, que no sean regalados por así decirlo”.

“Así que seguimos con la intención de meternos en ese ‘top 5’ aunque nos hayamos quedado un poco lejos, al menos en las posiciones de este año. Creo que, si seguimos trabajando como hasta ahora, podemos estar ahí, cerca de la lucha por las cinco primeras posiciones”. 

Dicen que ha sido la edición más dura en Arabia Saudí…

“Las circunstancias de este año han sido distintas. Han sido duras. Sobre todo, la primera semana, muy marcada por zonas de piedra, mixtas, con pequeñas dunas y todo el terreno muy mojado. Además de las tormentas. Zonas incluso muy resbaladizas. Aunque la verdad es que me ha gustado por eso, por lo que ha cambiado todo el tipo de terreno y condiciones. Que no sean sólo zonas rápidas, con todo recto, para digamos rodar a una velocidad alta de forma fácil”. 

¿Qué ha cambiado en esta edición?

“Antes buscaban zonas relativamente rápidas y poco rotas, donde poder rodar fácilmente a 150 km/h. En cambio, ahora son más físicas y más técnicas, te hacen trabajar más sobre la moto. A parte de mezclarlas con la navegación. Otro ingrediente más, con él que no contábamos, ha sido el agua, que lo ha hecho todo más complicado, con mucho frío por las mañanas”. 

Se vieron unas primeras etapas muy endureras…

“Creo que han sido unos primeros días, hasta la etapa de descanso, con 8 jornadas muy cambiantes y duras a la vez. En mi caso me ha gustado y me lo he pasado bien. Creo que, desde la organización, han hecho un buen trabajo en esta edición. Veníamos todos pidiendo que fuera un Dakar más exigente y variado, y lo han conseguido”.

¿Fue tan temible cómo se esperaba el Empty Quarter?

“La segunda semana, a partir de la etapa 10, entramos en el Empty Quarter. Todo el mundo tenía un poco de miedo por ver qué podía pasar, sobre todo por los kilometrajes, porque veíamos etapas relativamente cortas”. 

“Esperábamos especiales muy duras a nivel técnico y de pilotaje. Lo fueron en algunos puntos, pero a título personal fueron más suaves de lo que me planteaba. Con ello no quiero decir fueran fáciles, sino que las expectativas del Empty Quarter eran muy altas. Creo que la organización fue un poco precavida al diseñarlas, no sólo por las motos, sino por todos los vehículos que viene detrás: coches, quads, camiones…”

“Son dunas difíciles de franquear, muy blandas, poco visibles y con muchas pozas detrás de las crestas. Si cometes un error en ellas, con moto, es relativamente fácil salir. Te puede costar más o menos esfuerzo, pero sales. Sin embargo, con otros vehículos, puedes tener muchos problemas”. 

“Creo que por eso han intercalado zonas de dunas con chotts, lagos secos. A nivel de moto, ello supone un descanso para nosotros, porque normalmente te permite ir a velocidades algo más altas a pesar de que veces están un poco rotos, aunque no excesivamente, por lo que puedes rodar algo más relajado físicamente”. 

“Intercalar esas zonas, lo ha hecho más llevadero. Además del kilometraje de las especiales, donde la más larga era de 280. Aunque esta sí que fue durita. El resto eran de 150, 180… Especiales de menos de 200 kilómetros. En todo caso, más o menos rápidas”.

Antes, la última jornada era casi un paseo para el vencedor

“El último día solía ser una especial de trámite, pero en esta edición ha sido decisiva para la categoría de motos y para Kevin, quien ha ganado finalmente. A los pilotos nos ha hecho prestar atención y estar alerta hasta el último momento, ya que fue toda al borde del mar, intercalando zonas arenosas con zonas de pistas duras que daban al mar. Había llovido mucho esos días y las condiciones no eran fáciles, estaba muy embarrado en algunos puntos, con zonas arcillosas y de arena muy blandas”. 

“Fue otra especial corta, pero súper intensa en la que podías fallar, con muchos waypoints y partes técnicas en las que, si cometías un error, podías liarla. Y, al final, esa tensión de querer acabar, sin cometer errores, la hemos llevado hasta el último metro”. 

Finalmente noveno, ¿das por bueno el resultado?

“Ha sido un Dakar interesante, donde me lo he pasado bien y he intentado ser regular. En siete de las diez primeras etapas he acabado en el ‘top 10’, que era la idea que en principio teníamos, tratar de apretar un poco para estar del 5º al 10º puesto para estar siempre vivos en la clasificación general”. 

“Con este planteamiento, en la primera semana, he conseguido estar muy cerca de los diez primeros. Y en la segunda, con la baja de Walkner y Klein, ya me puse noveno. Estaba en una zona intermedia. Por un lado, lejos de la lucha por la victoria y a 20 minutos del ‘top 5’. Y por otro, con 40 minutos de ventaja con los de atrás”. 

“Así que, en la segunda semana, esas condiciones de dunas rápidas de ese tipo donde cuesta saber si son rotas o puedes mantener el gas, hicieron que fuera a un nivel más conservador las cuatro últimas etapas. Sin importarme mucho la posición en la que acabará, pensando más en la diferencia de tiempo que perdía con el primero, algún día de 15 o 17 minutos… Sin embargo, al final creo que las distancias eran cortas, como las especiales. Así que digamos que me lo he tomado con mucha precaución, minimizando riesgos para simplemente llegar hasta el final y conservar esa novena posición que es por lo que vamos.

El objetivo que nos habíamos marcado era conseguir un buen puesto al final del Dakar y es lo que hemos hecho. Por lo que, finalmente, estoy satisfecho con este noveno puesto y quiero agradecer al equipo, y a todos los patrocinadores, que siempre están ahí detrás, su apoyo en esta aventura año a año. Además de a toda mi familia, quienes por supuesto siempre están a mi lado para dar el máximo estas dos semanas. Y también a toda la gente que me sigue y está pendiente de lo que hago por redes sociales, con mensajes de apoyo. Estoy agradecido de que tengan esa inquietud y esas ganas de seguirme a lo largo de todo el Dakar".

Video y fotos: Sherco